• A través de la Senda Verde: llegando desde Lira es el primer destino que encontramos en la Senda.
• Desde la AC-550: en Lira, en dirección Muros, se toma un desvío hacia la izquierda a la altura del kilómetro 29. A 2,2 km. encontramos la mesa explicativa al lado de la puerta de acceso.

Está situado al lado de la senda. A los pocos metros de pasar la verja que cierra la zona, observamos el camino empedrado, de unos 20 metros, que sube al recinto superior a través de las murallas, acceso original de esta fortificación. Resulta sencillo el acceso.

A Torre dos Mouros es una imponente fortificación de inicios de la Edad Media. Ubicada en un cerro rocoso, tiene una vista privilegiada de 360º que abarca desde Monte Louro (Muros) hasta el Cabo Fisterra.

La fortificación consta de diferentes elementos:

Un sistema de dobles murallas que cierran este recinto de dos hectáreas de extensión. Las murallas se consideran monumentales, tanto por su grosor, de hasta cinco metros, como por su altura, que debió de ser destacable, teniendo en cuenta la cimentación de 3-4 metros de profundidad. Serían perfectamente visibles desde el mar.   

Dos recintos internos, el principal en la parte baja, la explanada a la que accedemos al atravesar las murallas. Un segundo recinto en la parte elevada, un reducto de más difícil acceso y que contaría con un cierre perimetral propio. De momento no es posible determinar el uso de estos recintos, en los que hay evidencias de la existencia de construcciones de carácter efímero.   

La entrada también es monumental, orientada hacia el puerto de Lira, en un claro sentido disuasorio frente a posibles ataques desde el mar. Este amplio recinto de carácter monumental presenta características divergentes respecto a los habituales del noroeste peninsular (los castros) o de los pequeños castillos y torres de su entorno. Las técnicas constructivas difieren también de las empleadas en los castros, lo que junto con la ausencia de restos materiales (cerámicas que justifiquen el uso doméstico), hablan de un uso diferente a éste. Según el estudio de los vestigios y del contexto constructivo, estaría diseñado para acoger a una comunidad de forma puntual, en momentos concretos que se corresponderían con aquellos de mayor virulencia de los ataques vikingos, más centrados en las épocas de navegaciones más favorables (primavera y verano). Después del siglo XII, con el cese de los ataques, dejaría de usarse como refugio y pasaría a un uso agro-ganadero.

El lugar pudo ser recuperado por medio de una iniciativa de arqueología pública de los vecinos de Lira y voluntarios.

“Gravados rupestres nos montes de Carnota”
José Cernadas Sande.
tresCtres Editores.
Santa Comba (A Coruña) 2008.
TOMO V – CATÁLOGO  PLAN GENERAL DE ORDENACIÓN MUNICIPAL – CONCELLO DE CARNOTA  DOCUMENTO PREVIO A LA APROBACIÓN INICIAL EQUIPO REDACTOR: SCQ TAU territorio, arquitectura y urbanismo SLP ABRIL 2013.